Imatge presa de la xarxa
CUSTÒDIA DEL QUADERN DE NOTES
La rosa del cor és un hoste pàl•lid, un núvol desossat davall del pit, mera rutina domèstica que xiuxiueja o brama en dues llengües: quan l’acaronen, quan la colpegen. Sempre, però, amb la consciència que acabaran arrencant-la de la pell del desig que ara amaga el seu principi. No només és amor el que és Amor, sinó empremtes, silenci, misteri.
(de El gran cafetar, novembre 2011)
CUSTODIA DEL CUADERNO DE NOTAS
La rosa del corazón es una huésped pálida, una nube deshuesada bajo el pecho, mera rutina doméstica que susurra o grita en dos lenguas: cuando la acarician, cuando la golpean. Pero siempre con la conciencia de que acabarán arrancándola de la piel del deseo que ahora oculta su principio. No sólo es amor lo que es Amor, sino huellas, silencio, misterio.
Etiquetas: Pere Bessó
16 comentarios:
Los "efectos secundarios" del amor es una gama bastante amplia...Me ha gustado la sencillez y claridad con que lo has expresado.
Un abrazo, Pere
2 de diciembre de 2011, 18:01
De acuerdo con Ángela mi estimado Pere. Bello.
Un beso con mi cariño de siempre.
2 de diciembre de 2011, 18:29
Sí, respondo a Ángela y Leticia: salvadas las distancias, rayos infra.
Queda el sueño, la vigilia, la pizarra o la pantalla. Y, a la postre, el comezón. Eso siempre. Y marca, que sí...
Pere
2 de diciembre de 2011, 22:44
¡ahí es nada: la nube deshuesada del pecho!!! donde el yo íntimo permanece con todas sus emociones y pensamientos!!
un beso desde el Pisuerga!!
4 de diciembre de 2011, 0:53
Ah, querida amiga, aprovecharé el Pisuerga y tomaremos un riberita, seguro, aunque sólo sea para dejar la nube en manos del clown...
Un beso.
Pere.
4 de diciembre de 2011, 5:54
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
4 de diciembre de 2011, 22:33
Borré mi comentario sin querer, oh poeta. En él te decía, con otras palabras, que es normal que sean tan fotogénicos dos adonis como Pere Gimferrer y tú. Impagable documento esa fotografía del maestro receptivo a su desvivido discípulo. Me la he guardado para colocarla en la mesita de la cama. Y adiestraré a mi perro para que os dé un lametón antes de dormir. Aunque quizá no sea necesario, porque acabo de imprimirla y está moviendo la cola (señal de que a él también le ha hecho gracia el documento).
4 de diciembre de 2011, 22:53
Me has hecho sonreír, Zorro de la vega: adonis,yo? jejeje.
Que santa Lucia nos conserve la vista- a ti por mirarme con esos ojos (no creo que sea ignorancia de la mitología); a mí, para poder leerte, cuando sepa con propiedad quién eres.
Parece que te agrada Pere Gimferrer. Es uno de mis poetas de cabecera. Coincidimos, pues.
Me encantará saber más de ti.
Mi correo: perebesso@hotmail.com
Un abrazo.
Pere
5 de diciembre de 2011, 11:20
"No sólo es amor lo que es Amor, sino huellas, silencio, misterio."
Es así, estimado Pere.
Un beso.
Mercedes
5 de diciembre de 2011, 18:09
Querida Mercedes.
Y en ésas estamos.
Un beso,
Pere
5 de diciembre de 2011, 23:44
Bello, para reflexionar, Pere.
Un beso
Ana
10 de diciembre de 2011, 2:10
Gracias, Ana.
Justo cuando el poema comienza a extrañarme y deja de ser algo mío.
Me sorprende.
Un beso, amiga.
Pere
11 de diciembre de 2011, 15:59
aroma, sensualidad, dolor, sueño, pasión, todo eso es el amor en esa roza del corazón: Misterio. Abrazos Julia
13 de diciembre de 2011, 3:22
Quien lo probó lo sabe.
Eso decía un clásico poeta cortesano del XV. en "Diciendo qué cosa es Amor"...
Palabra viva que lo contiene todo y sus contrarios...
Un beso, Julia.
Pere.
13 de diciembre de 2011, 10:17
Querido Pere:
Cuando uno escribe un poema lo siente suyo. Cuando pasan los días ya, el poema, tiene una vida propia. Entonces uno se extraña de haber escrito eso. Uno se pregunta ¿eso lo escribi yo? Y...sí...el poema lo hemos escrito, pero ya no nos pertenece. Se pertenece a sí mismo o al mundo. Esas cosas pasan.
Un beso, Pere
Ana
18 de diciembre de 2011, 0:49
Ciero, Ana. Así es.
Un beso,
Pere
18 de diciembre de 2011, 13:41
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