VIVALDI-PERE BESSÓ
Era estiu,
o la fi d'estiu.
I oí llavors les teues empremtes,
mentre arribaves del Sud,
ofrenat als vents de la desidia
per la darrera vegada.
Era estiu,
o la fi d'estiu:
Hi havia encara hores daurades
espurnejant semença en el besllum del capvespre.
El silenci ensebolit amb les fulles carnals
dels teus llavis
fou mortalla de cendra
per la darrera vegada.
Era estiu,
o la fi d'estiu,
i mai no te n'adonares,
perquè l'ombra de la música
dels teus pits oblidats en la fronda
era ornada de lilàs
per la darrera vegada.
(de Pagaràs els ous de cugul, 1988)
VIVALDI
Era verano,
o el final de verano.
Y oí entonces tus huellas,
mientras llegabas del Sur,
ofrendado a los vientos de la desidia
por última vez.
Era verano,
o el final de verano:
Aún había horas doradas
chispeando simiente en el trasluz del atardecer.
El silencio sepultado con las hojas carnales
de tus labios
fue mortaja de ceniza
por última vez.
Era verano,
o el final de verano,
y nunca te diste cuenta,
porque la sombra de la música
de tus pechos olvidados en la fronda
estaba adornada de lilas
por última vez.
Etiquetas: Pere Bessó, poema
10 comentarios:
Estimado Peré Besso: hermoso poema, extraordinario poema del abandono, la pérdida, el ocaso. Profundo y lleno de reminiscencias, un placer para el espíritu leerlo y deleitarse en él.
Un abrazo fraterno
29 de agosto de 2010, 1:33
Exquisito el descurrir de las estaciones y cuando llega a su punto final, ese cambio de vientos y las mentiras de los árboles arrullando las notas....
Saludos, Maestro.
29 de agosto de 2010, 5:31
Querido Cristian:
Sí, es un poema ya lejano y lleno de reminiscencias. De cuando en cuando vuelvo al pasado y reviso y, por una u otra razón, soy benigno y autocomplaciente conmigo -ay, la debilidad- y rescato algún texto para el blog.
Rompe monotonía y canon. Pero aligera la voz.
Un barazo por seguirme tan de cerca.
Pere
29 de agosto de 2010, 11:10
Sí, Centenaria, las mentiras de los árboles con su arrullo que los simbolistas supieron ver. Ay de las acacias de Marià Manent, por ejemplo...
Senderos que nos marcan las raíces de los árboles femeninos, caída y cadencia de esas hojas y notas que dices...
Un beso con sesgo de centeno.
Pere
29 de agosto de 2010, 11:14
Qué precioso poema, Pere. Sentimientos y recuerdos en una amalgama perfecta, con la música de Vivaldi de fondo. A veces un recuerdo se torna una visión...
Abrazos de agosto
Anna
29 de agosto de 2010, 22:19
La naturaleza y la música se conjugan en este lamento de amor , en el clima envolvente de las "lilas" y la muerte, donde ése "por última vez" nos arroja a una realidad dolorosa. Muy logrado Irene Marks
29 de agosto de 2010, 22:21
Sí, Ana:
Y en ocasiones, como ésta, una visión deja de ser fantasmagoría para aparentar -y apacentar- recuerdos.
Un déjà vu junto a Rosa Iglesias, Marlén, Fausto leonardo Henríquez y Teonilda Madera.
De pronto suena el teléfono...
Pere
30 de agosto de 2010, 1:55
Gracias, Irene:
Has sabido ver perfectamente la imagen de la muerte en las lilas por última vez.
Un abrazo.
Pere
30 de agosto de 2010, 1:57
Un poema molt bonic, tendre i delicat.
M'agrada molt
30 de agosto de 2010, 9:07
Gràcies, Joana:
és un poema, Vivaldi, que pertany al poemari "Pagaràs els ous de cugul", que guanyà l?ausiàs March de Gandia, l'any 1988, un poemari escrit, doncs, en un periode que abastava tres anys (1985-1988), temps de cugul, efectivament, i que jo intuí fins que es va fer, dolorosament, realitat...
Una abraçada, amiga.
Pere Bessó.
30 de agosto de 2010, 11:22
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio